miércoles, 27 de junio de 2012

Merienda/comida nº 2

La segunda merienda de cine tuvo lugar el pasado jueves en el restaurante Rossopomodoro, en el mirador del centro comercial Las Arenas, y su principal particularidad fue que no fue una merienda sino una comida. Cuán adaptables somos, pardiez.

Esta vez aumentamos el número de participantes hasta ¡ocho!, siete de los cuáles eran repetidores de la primera convocatoria. Esto comienza a funcionar, quién lo iba a decir. El hecho de que algunos de los participantes no hubieran visto alguna de las dos películas no restó ni un ápice de calidad a la conversación, que derivó del cine a los temas más diversos, pero con un trasfondo común: lo bien que lo pasamos.

La música del local y la disposición de la mesa no ayudaban a que nos oyéramos todos (algo a mejorar en la siguiente merienda), pero una de las cosas que quedaron bastante claras es que, a excepción de a una persona, Promoción Fantasma no acabó de gustar. ¿Quizás por ser española? La verdad es que para algunos ese es un motivo para descartar directamente la peli, aunque algo injusto. Aprovechando la ocasión se habló de Almodóvar, de Balagueró...
De todas maneras si la analizamos con detalle, la película es ciertamente flojita; para venderse como comedia no hay muchos momentos de carcajada, corroborado por el hecho de que la versión que vimos estaba grabada del cine y no se oyen risas. Tiene sus momentos, sí, pero poquitos. (Inciso: ¿No tendría su gracia que los DVDs trajeran además de una pista de audio con los comentarios del director, otra con el sonido de la sala de cine en el estreno? Quizás se lo propongamos a alguna distribuidora). La historia tampoco es para tirar cohetes y cojea un poco en ocasiones. Por ejemplo, no nos explican en ningún momento por qué los cinco alumnos muertos están castigados cuando se produce el incendio. Y, para ser un colegio privado con profesores con tendencia a los accidentes donde además ocurren sucesos extraños, la verdad es que está bastante lleno de alumnos. En fin, suspensión de la incredulidad, lo llaman. Como ya se apuntó en twitter, Will Smith ha comprado los derechos para hacer un remake en USA. ¿Punto a favor o en contra? Lo dejamos a vuestra elección.

Propuestas educativas, er, digámosle... revolucionarias. Al fin risas.
-"Soy gay." - "Y yo el pgíncipe."

Sí hija, sí, tienes un montón de alumnos para tener cinco fantasmas en el edificio.
"¿Un traguito? Lo necesitarás para el resto de la peli."


Uno podría pensar entonces que los presentes se decantaron sin pensarlo por El club de los cinco. Pues sí y no. A pesar de ser una mejor película, parece que el paso de los años le ha jugado una mala pasada y no acaba de soportar bien un segundo visionado. No es la única que adolece de este problema, durante la comida se comentó que por ejemplo a Tesis, de Alejandro Amenábar, le pasa lo mismo. Opiniones...
Se estuvo de acuerdo en que la historia de El club de los cinco, película mítica del cine teen de los ochenta, estaba mejor construida; aquí por ejemplo sí que sabemos por qué castigan a cada uno, pero se apuntó que el final estuvo un poco forzado. ¿Se sientan en el suelo, desnudan levemente su alma y se hacen amigos para siempre? A algunos de los participantes esto les chirrió. También se criticó el hecho de que el cambio de imagen de Allison, la chica rarita interpretada por Ally Sheedy, fuera tan radical debido sin duda a la malvada influencia de Molly Ringwald. Hay que señalar que esto fue sacado por el sector femenino del debate, el masculino no le dio en absoluto importancia al hecho de que Allison tuviera el pelo en la cara o recogido con una diadema. Cosas del cromosoma Y...

"Ah, ¿que no sabíais que las barras tienen pegamento?"

Qué bien hablas, Molly, queremos ser tus amigos pa siempre jamás.

¿Vestido rosa y diadema o greñas en la cara? Who cares...


La verdad es que se nos olvidó hacer la votación entre ambas pelis, pero poniendo un símil futbolístico (tema que también salió durante la charla), se podría decir que El club de los cinco fue como un grande jugando un partido de trámite a las cinco de la tarde contra un recién ascendido: ganó jugando al ralentí pero sin acabar de convencer.

Tan solo recordar que, como ya se dijo en la anterior merienda, no pretendemos dar lecciones de nada, sólo expresar nuestra opiniones.

Para acabar, el sitio fue una buena elección. Las pizzas estaban muy ricas y el postre estuvo bien, aunque el tiramisú no parecía tiramisú de verdad. Y la cuenta fue redonda, aunque no divisible por ocho, lo que provocó cierta controversia al final.


Como anécdota, ahí va una foto de algunos de los componentes del reparto de El club de los cinco en los Oscars de 2010 en un homenaje que se le hizo a su director John Hugues, fallecido el año anterior. Algunos han envejecido peor que otros (sí, Molly, va por ti). Una curiosidad: ¿qué será esa cuerda colgante en el pantalón de Judd Nelson? ¿Un reloj de bolsillo laaargo? ¿La etiqueta de la levita? Misterio...


Esperamos vuestros comentarios y os esperamos personalmente en la próxima merienda. Los que estuvieron el jueves ya saben cuál es la nueva propuesta, al resto que sólo nos leeis pronto os la haremos saber.

4 comentarios:

  1. Sí, a mí me gustó Promoción Fantasma. Y yo la vi de forma legal.
    ¿Por qué está tan moreno Jon Cryer en esa foto?

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    1. Gracias, tú nos salvarás de las hordas de la SGAE. Jon Cryer está tan moreno porque no tenía claro de dónde salían los chorros en la cámara de bronceado instantáneo y tuvo que hacerse varias capas.

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  2. He de decir que al final no he pedido asilo político después de ver "Promoción fantasma". He de reconocer también que aunque no es para tirar cohetes, me he reído con algunos trozos.

    Hasta cierto punto me sabe mal que no sea mejor la película, quizás con un guión mejor y unos actores jóvenes con un poco más de carisma la cosa hubiera cambiado. Los actores "mayores" son los que me han gustado más, sobretodo los componentes chanantes. ¿Será que me hago mayor?

    Hace mucho tiempo que conozco "El club de los cinco" y siempre me ha gustado, aunque no la pondría en mi lista de favoritas de la muerte. Estoy casi segura que la primera vez que la vi no sabía qué era el sushi, me impactó ver un cole como aquel. En realidad suelen hacerme gracia las películas americanas ambientadas en institutos, me resulta tan familiar a la par que exótico.

    Por cierto, el señor director tiene su punto. Es muy posible que ese hombre empezara siendo profesor con ilusión. Apuesto a que la primera vez que vi la película no empaticé con él. Esta vez sí que lo he hecho. Le entiendo... ¡sí que me hago mayor!

    En resumen, es posible que vuelva a ver "Promoción fantasma", segunda oportunidad de ver si se me ha escapado algo. Lo que no podré evitar en avanzar rápido algunas escenas, posiblemente.

    Y es casi seguro, que cualquier día aburrido que tenga en un futuro, decida volver a ver "El club de los cinco". ¿Por qué no?

    Ah, por cierto, creo que Jon Cryer está tan moreno para que se le vean aún más blancos los dientes. ¡Necesito unas gafas de sol yaa!

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